Hospital Central: Capitulo 21

Capitulo 21

Por la tarde decidieron ir a dar una vuelta por el parque observando a las palomas comer tranquilamente mientras ellos disfrutaban de su compañía.

Dieron de comer a las palomas e incluso se tomaron un helado cuando decidieron volver a casa para cenar juntos y ver una película.

Raquel: Cariño el agua esta lista…

Unos fuertes brazos la rodearon por la cintura y una vigorosa fuerza la golpeo ligeramente en el trasero diciéndole que su pareja ya estaba lista para el baño.

Gines le quito lentamente la única bata de seda transparente que le cubría el cuerpo mientras dejaba pequeños besos por sus hombros y tiro la tela lejos de ellos.

Raquel se giro para probar sus labios mientras se metía con él en la bañera y se apoyaba sobre su duro pecho dejándole besos por el cuello y el pecho.

Gines le aparto el pelo de la cara acariciando tímidamente su espalda mientras ella acariciaba su abdomen.

Raquel llego a su longitud y lentamente comenzó ha acariciarlo mientras sonreía y dejaba un rastro de besos por su cuello.

Gines temblaba en su toque, era casi irreal como podía encenderlo así solo con la respiración en su oído y su leve toque en su verga hinchada.

Gines: Ah Raquel…

Raquel sintió como su boca bajo hasta su pezón y comenzó a jugar con él y luego con el otro enviándole mil escalofríos por su cuerpo.

Raquel: Gines…

Su voz llena de deseo y satisfacción por lo que le estaba haciendo le hicieron crecer más y la apoyo contra la bañera, necesitaba probarla.

Raquel miro avergonzada como le abría las piernas, tenia miedo de que no le gustara o que ella se sintiera incómoda…

Gines acaricio sus muslos lentamente con sus rasposas mejillas antes de aspirar su aroma y besar su zona con mucho cuidado.

Raquel suspiro ante su cuidado, su toque era mágico y solo podía pedir que nunca se acabara este momento.

Antes de se diera cuenta, Gines introdujo su lengua en ella y la movió lentamente dentro de ella enviándole descargas por todo su cuerpo.

Se arqueo en la bañera para tener más de la locura que le estaba dando y Gines solo pudo acelerar su ritmo mientras preparaba su verga para darle paso.

Raquel lo miro y agarro su pelo deseando todo él dentro de ella y con una sonrisa Gines la obedeció introduciéndose en ella con un magistral envite.

Raquel vibra en sus brazos cuando nota su grosor en ella y comienza a moverse lentamente, mirando sus ojos verdes.

Gines acerca su boca a la de ella y comparte sus suspiros mientras se mueve lentamente disfrutando de la sensación tan especial.

Se mueven al mismo ritmo, lleno de susurros de amor completamente embelesados por el otro mientras su locura va llegando al límite de sus fuerzas.

Raquel muerde su oreja cuando nota una sensación de temblor y placer dentro de ella y escucha el grito de Gines segundos después.

Entonces Gines se mueve colocándose detrás de ella para abrazarla mientras apoya su cabeza sobre la de ella y suspira.

Raquel: No hagas muchas locuras ¿eh?

Escucha la risa de Gines y se apoya más contra él sonriendo mientras deja que su cuerpo tiemble con la resonancia de su risa.

Gines: ¿Vendrás más rápido si me hago daño?

Raquel: Vendré volando…

Gines besa su mejilla y cierra los ojos apoyándose contra ella, pensando en una manera de detener el tiempo en este momento.

Raquel: Vendré en dos meses y ya no nos separaremos nunca más te lo prometo.

Gines: Lo se…

Y aún así tenia este maldito presentimiento, como si algo los fuese a separar de la peor manera posible.

Entonces Raquel giro su cabeza para mirar sus ojos y le dejo un beso lento y tan intimo que les asusto a los dos.

Raquel: Ten cuidado ¿vale?

Gines: Te lo juro….

Raquel apoyo su frente en la de él y suspiro, algo iba a pasar ella lo sabia, él también y ahora solo era cuestión de tiempo.

Lentamente se bañaron cariñosamente uno al otro, después se marcharon a la cama a descansar ya que mañana Raquel se marcharía…