Buscar este blog

miércoles, 28 de abril de 2010

Almost Red: Capitulo 29

Capitulo 29

Largo rato después de fiesta, recuerdos y risas, la casa queda vacía con solo Raquel y Gines en ella…ella recoge y él…él solo la mira.

En todo este tiempo nunca pensó que una sola mujer fuera a cambiar el curso de su vida, le daría vida, hijos y algo de esperanza para el futuro.

Y a la vez el miedo de la despedida, de los te quiero a medias y de volveremos a vernos sin ni siquiera saber si será verdad.

Raquel: Cariño, vamos a la cama.

Gines asiente lentamente, pesado en cuerpo y el corazón, siente que todas las emociones de este día le atacan y de repente se ahoga, no puede respirar mientras las lágrimas le inundan y se mira al espejo, su última noche o la primera de su vida.

Gines: Voy en seguida mi amor.

Gines se lava la cara y sale viendo a su mujer en la cama esperándolo, su sonrisa le hace pensar que todo es como siempre pero sus ojos llenos de miedo le hacen ver que no es así.

Esa noche es distinta, Gines la abraza a su pecho mientras ella se recuesta, solo escuchando el latir de su corazón…solo sintiendo la vida que queda en el hombre que ama desde que era una niña.

Gines: Te amo, Raquel.

Raquel cierra los ojos, aguantando las lágrimas mientras las palabras la atraviesan como un rayo y se aferra más a su cuerpo intentando mantener la calma en la tormenta de la noche silenciosa que les queda, la última o la primera, solo sabe que cambiara su vida para siempre.

Raquel: Siempre te amare, mi amor.

Y así se sumen en un sueño de amor y miedo donde sus mentes se juran amor eterno, pase lo que pase.

A la mañana siguiente, Raquel despierta pero con frío a su lado y no el calor de su marido.

Raquel: ¿Gines?

La única respuesta es el eco de su propia voz…la voz del silencio ante lo desconocido.

Entretanto Gines pasea por las calles que siempre a conocido desde niño, aquí se enamoro de Raquel y conoció a sus amigos y aquí quería estar antes del gran momento.

Raquel: Recordando viejos tiempos.

Gines se gira para ver a su mujer en los muelles del parque con una pequeña sonrisa y se acerca a ella rodeándola con sus brazos.

Gines: Si, lo necesitaba antes de irme.

Raquel: Gines…pase lo que pase, estaré contigo siempre, te amo.

Gines: Y yo a ti mi amor, siempre y con el o la bebe, sois mi vida y mi fuerza y por vosotros volveré.

Raquel sonríe entre lágrimas y le envuelve en un tierno beso lleno de todos los sentimientos a los que no pueden ponerle nombre.

Gines: Mira eso, amor.

Raquel mira el pequeño árbol donde Gines grabo sus nombres y puede ver que han florecido unas pequeñas flores.

Raquel: Increible.

Gines: Vamos, es hora.

Raquel mira su mano y la aprieta fuerte, pase lo que pase, ellos estarán juntos y ni la muerte podrá evitarlo.

Raquel: Vamos.

Juntos se dirigen a sus sueños, sueños que cumplirán cueste lo que cueste.

3 comentarios: